· Una sociedad es adolescente cuando sus adultos matan y se matan en las rutas, conduciendo sin respetar normas, sin asumir responsabilidades, obsesionados por dar absurdas demostraciones de no se sabe que habilidad, superioridad o falso coraje
· Una sociedad es adolescente cuando sus dirigentes (políticos, empresariales, sociales, deportivos) actúan urgidos por sus intereses propios, desconociendo toda noción de pertenencia a un conjunto, así como un adolescente se prioriza sobre su familia
· Una sociedad es adolescente cuando la mayoría de sus adultos desprecia los espacios públicos y comunes, los maltrata los usa en beneficio propio, cuando ensucia, no cuida, invade, depreda creyendo que esos espacios se auto conservan o que alguien (un funcionario, un adulto, “cualquiera”) se hará cargo de limpiar, preponer, ordenar, pagar, como lo hacen papá, mamá, la mucama, el portero o el preceptor
· Una sociedad es adolescente cuando durante más de una década hace un culto de las burlas al otro, del maltrato a la mujer, de la ignorancia como bandera, del oportunismo político, del sexismo primitivo, del humor de patota que hicieron de Marcelo Tinelli y su trouppe de obsecuentes un referente social, ante el que incluso quienes aspiran a gobernar el país ( o lo mal gobiernan) se postran en vergonzosa genuflexión
· Una sociedad es adolescente cuando llora a un personaje transgresor, discriminador, que exhibe impunemente su intimidad, como fue el actor Fernando peña, y lo vela en el palacio de
· Una sociedad es adolescente cuando las pantallas de sus televisores están intoxicadas del lenguaje elemental y de los chistes estudiantiles y babosos de la mayoría de sus periodistas deportivos, quienes hacen de la incultura un trofeo orgulloso y de la escasez de vocabulario una señal de identidad
· Una sociedad es adolescente cuando carece de criterio para distinguir entre las habilidades futbolísticas de su máximo ídolo deportivo, Diego Maradona y sus conductas irresponsables, su discutible ética, sus valores acomodaticios, y cuando cree que aquellas habilidades justifican estos desvalores y cuando, como adolescentes, ve a estos como a un atributo envidiable
· Una sociedad es adolescente cuando discrimina (la sociedad argentina lo hace en cuanto a sexo, nacionalidad, color de piel, origen niveles económicos, filiaciones políticas, afinidades deportivas, edad); la discriminación es una característica adolescente en búsqueda de una identidad: para ser algo tengo que no ser lo otro, aunque no sepa qué soy .
Sergio Sinay
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