Bailamos entre los escombros de una cita.
Dibujamos una taza de café en el desierto.
Vivimos de sumar y de restar:
lo que te da el amor, lo que te quita el miedo.
Al final nos entregan los huesos de un perfume.
Aún así persistimos.
En alguna montaña vive un pez resbaloso.
Entre números rotos se desliza una estrella.
Está dormida, sueña, sus párpados esconden un aplauso cerrado, un puñal de hojalata, un castillo de mimbre.
Al fin se va y no creo extrañarlo en lo màs minimo, se va con un caudal de lagrimas que brotan desde las entrañas màs recondidas de la tristeza, (esa que se parece muchisimo a la alegrìa). Se lleva pedasos de mi que nunca voy a recuperar, y algunos que ni siquiera pienso buscar. Adios 2009, hasta nunca.
lunes, 28 de diciembre de 2009
Primer Movimiento: El sueño Segundo Movimiento: Lo de fuera Tercer Movimiento: Lo de dentro Cuarto Movimiento La realidad
viernes, 25 de diciembre de 2009
Leli dejà de irte, te llevas a mar del Plata un gran cacho de mi ser.
"—Estaba al borde de un cantero, una flor amarilla cualquiera. Me había detenido a encender un cigarrillo y me distraje mirándola. Fue un poco como si también la flor me mirara, esos contactos, a veces... Usted sabe, cualquiera los siente, eso que llaman la belleza. Justamente eso, la flor era bella, era una lindísima flor. Y yo estaba condenado, yo me iba a morir un día para siempre. La flor era hermosa, siempre habría flores para los hombres futuros. De golpe comprendí la nada, eso que había creído la paz, el término de la cadena. Yo me iba a morir y Luc ya estaba muerto, no habría nunca más una flor para alguien como nosotros, no habría nada, no habría absolutamente nada, y la nada era eso, que no hubiera nunca más una flor. El fósforo encendido me abrasó los dedos. En la plaza salté a un autobús que iba a cualquier lado y me puse absurdamente a mirar, a mirar todo lo que se veía en la calle y todo lo que había en el autobús. Cuando llegamos al término mino, bajé y subí a otro autobús que llevaba a los suburbios. Toda la tarde, hasta entrada la noche, subí y bajé de los autobuses pensando en la flor y en Luc, buscando entre los pasajeros a alguien que se pareciera a Luc, a alguien que se pareciera a mí o a Luc, a alguien que pudiera ser yo otra vez, a alguien a quien mirar sabiendo que era yo, y luego dejarlo irse sin decirle nada, casi protegiéndolo para que siguiera por su pobre vida estúpida, su imbécil vida fracasada hacia otra imbécil vida fracasada hacia otra imbécil vida fracasada hacia otra...
Pagué."
(Una flor amarilla, Final del Juego, Julio Cortazar 1956)
domingo, 20 de diciembre de 2009
Desde el seco orificio
Que desglosa de un impacto nítidamente circular
Las astilladas estrías se bifurcan, se ramifican
Como inorgánicas y frágiles raíces a través del vidrio
Descascarando el reflejo de una tupida aglomeración
Una urbe que segrega clorofila sintética y soledad
Una imagen deformada, embebida en luces
De dilatadas avenidas donde
Un caudal constante de Vicios y virtudes transitan
Encubiertos en la indeleble en la viscosidad de la ciudad,
Entre ásperas arboledas de retorcido concreto
Nutridas del un pútrido pantano
Que se halla en las napas más ondas del espíritu,
Corren, Urgidos por la prisa
Evadiendo los pétalos de jugoso matices
que se afianzan, demoliendo el silencio
Ese espacio vacío donde se incuba el estruendo de su risa
En las callejuelas
Retumba el sollozo quedado de un reloj
El interferido ronroneo metálico de una radio
que digiere con rapidez las desdichas ajenas
Y la suerte nómadase arrastra ultrajada
Vomitando sangre y pétalos marchitos
Salando las llagas infectas de los mohosos suburbios
Donde una muerte tambaleante
Tararea afónica,
Un vals desafinado
Con resabios
de azufre
y cenizas
viernes, 18 de diciembre de 2009
FelìzCumple al amigo màs lindo que se puede tener
miércoles, 16 de diciembre de 2009
~
lunes, 14 de diciembre de 2009
La lluvia siempre es una bendición. Un refugio. La posibilidad de alzar la mirada, de sentirme homogeneo con el paisaje, con las personas. La lluvia reparte tristeza en partes iguales y me parece que a los demás les toca lo mismo que a mi me toca: una paz de alcantarilla. Pero todavía no llueve y no hay ni un alma en la calle. Parece que no viviera nadie. La escarcha no se termina de derretir en los manchones de pasto que coronan los troncos de los arboles. Tanta soledad dentro y fuera de las casas. Es como si supiera todo de esta gente, como si los conociera de siempre, como si yo mismo los hubiera creado. Miro la creación. Que haya luz. Mercurio venenoso en la nuez de adán. No están tan muertos como creen. La vida es sutil pero respira, se manifiesta en los colores sepia del aire, en su densidad electromagnética, en el volumen rabioso de los techos grises cubiertos de membranas asfálticas, chapas y aluminio. Todas las cuadras se parecen entre sí, están hechas a imagen y semejanza unas de otras, como si alguien hubiera encontrado la arquitectura exacta de la sumisión al tiempo, del temor a la belleza de la vida. Una arquitectura que representara la tristeza de la peor manera posible, que la condensara y la condenara a vivir ahí, confinada en los musgos verdosos de las grietas que forman en los revoques, en los rincones olvidados de estas fachadas destinadas invariablemente a afearse.
[Pablo Ramos]
viernes, 11 de diciembre de 2009
Me voy a Colombiaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
martes, 8 de diciembre de 2009
En una esquina de su boca se dejó estrellar, como la ola que se entrega a la roca, perdida en el abismo de unas manos sin final, tan grandes que abrazaban todo su planeta.
Ahora no estás aquí, ahora no estoy aquí, pero el silenció es la más elocuente forma de mentir.
Summertime
domingo, 6 de diciembre de 2009
las sombras empezaban a andar por las callejas con un olor desconocido algo como tus pechos después de haber amado eras oscura Ofelia para entonces y enormemente triste una adivinación una catástrofe un oleaje de olvido después de la ternura una especie de culpa sin castigo de furia en paz con su gran guerra
JuanGelman
miércoles, 2 de diciembre de 2009
a pesar que para resumir este año no usaria palabras especialmente lindas, tengo que aceptar que crecì abruptamente con todo lo que esto trae con sigo, que a pesar de los cachetasos que sigo dandome este año siempre tuve de donde regatear una sonrisa y eso donde voy a dejar de agredecer(selos).
Rompo este huevo
y nace la mujer y el hombre.
Y juntos vivirán y morirán.
Pero nacerán nuevamente.
Nacerán y volverán a morir
y otra vez nacerán.
Y nunca dejarán de nacer,
por que la muerte es mentira.